martes, 7 de agosto de 2012

SIDRERÍA BORNAX BARDENAS: VACA Y OTRAS DELICIAS A LA BRASA

El esperado retorno a la actividad gastronómica, tras un largo periodo en el dique seco, es sin duda un momento especial. Hacerlo acompañado de un selecto grupo de compañeros de trabajo y amigos lo es aun más. Acertar con el restaurante elegido es complicado, así que más vale no arriesgar.

Partiendo de esta base, el pasado viernes al salir de trabajar, me desplacé con tres amigos hasta la localidad de Valtierra. Un  pueblo de la ribera navarra del que bien podría uno pensar que ostentara el titulo de "El más alargado del mundo", por lo que cuesta atravesarlo.

Nuestro destino la Sidrería Bornax Bardenas. Un sitio que no falla. Uno de tantos, en este privilegiado entorno gastronomico de España.

Despues de esta tercera visita sigo pensando que esto sigue siendo así: Que no falla.

El Bornax es una sidrería que tiene un aspecto muy agradable, que trasmite comodidad, a traves de sus paredes acristaladas con vistas al jardin y las brasas donde se cocina vistas, que le dan un caracter especial.
Aunque sin duda lo más especial de su caracter es el olor del local: A carne de vaca a la brasa. A "carne de vacuno mayor" como se dice en los gastrobares ultimamente.
Y a esto ibamos, desde luego. A comer chuletón de vaca.

Al llegar fuimos recibidos por el "Jefe de Sala", nos aposentamos y él mismo nos asesoró en materia de vinos. Nos dio a elegir entre vino navarro o Rioja, y a pesar de estar yo en minoría regional de tres a uno, pedimos un Rioja. Nos dejamos aconsejar y el "maitre" acertó con el consejo: Sirvió Doña Toda, crianza 2007, un vino del entorno de Haro (Anguciana).

A 14€ la botella, y fueron dos.

Bastante bueno para mi gusto y sin duda recomendable.


Para abrir boca un aperitivo de la casa: helado de foie con miel y frutos secos sobre tosta de pan de pasas. Impresionante el bocado. Lástima que se quedara algo escaso de diametro.


Racion de pulpo para cuatro con la que despertar el estómago: Con patata, cebolla y pimienton semipicante, y regado con aceite de calidad, del que obviamos preguntar su procedencia. Bastante bueno. No diremos que espectacular, pero cumplió.



A continuación langostino tigre a la brasa. En singular, sí. A 9 euros la unidad. Aqui en el Bornax tienen una nutrida oferta de langostino tigre, con varios precios segun calibre. Este es de los de precio mayor y es espectacular. No se si la imagen vale aqui mas que mil palabras, pero no me salen las palabras para describir el placer al degustar este manjar.



Comí langostino tigre en Bajo de Guía, en Sanlucar de Barrameda, a orillas del Guadalquivir. Intuyendo al otro lado Doñana. A 5 euros la unidad. Me dejó frio y lo traté de olvidar. Unas piezas de tamaño poco mayor que mi pulgar. Cocidos. En el mejor sitio que se puede probar, reza la propaganda. No merece la pena. Es mejor el langostino tigre que yo he comido es el de Valtierra, en las estribaciones de la Bardena, que ironía.

Después llegó el plato estrella: Chuleton de vaca. Dos de algo más de un kilo para cuatro. a 36 euros kilo. Buena racion y buena calidad. Se nota que saben trabajar la carne. Estaba bien curada, porque estaba tierna y bien asada. Servida en plato de barro caliente. Una delicia.


Mi postre un tiamisú. Peculiar y finisimo.
Cortado y chupito de pacharan: Baines.

Precio persona 50€. Ostentoso en estos tiempos de crisis. Pero hay ocasiones que merecen la pena y acontecimientos que hay que celebrar.