lunes, 30 de mayo de 2011

RESTAURANTE MONTE REAL SAN ROMAN DE CAMEROS (LA RIOJA)

El valle del río Leza, el Camero Viejo, es sin duda uno de mis lugares preferidos. Es muy recomendable acceder desde el valle y remontar el río a través de su sinuosa carretera, que conoció tiempos peores, vigilados desde lo alto por los de Trevijano, y realizando una  parada obligada en el Cañón del Leza y en el municipio de Soto en Cameros. Seguir el camino, ver abrirse el horizonte a partir de Terroba (y su nueva presa) y llegar a San Román que bien merece una visita. Aunque el camino sigue hasta Laguna, pasando por Jalón y Cabezón, en San Román nos encontramos con el siempre abarrotado Restaurante Monte Real. Es un restaurante de siempre, de cocina casera y de no grandes lujos: verduras y legumbres a la riojana, guisos de cordero, famosas carrilleras, patorrillo...se come bien por un precio moderado: unos 10 euros de menu y entre 15 y 20 a la carta, según lo que uno elija. Es desde luego el más concurrido del valle  también a la hora del almuerzo en la que sirve buenas cazuelitas y raciones a paseantes, ciclistas y moteros...Y si teneis ocasión no dejeis de probar sus licores caseros.

viernes, 27 de mayo de 2011

RESTAURANTE LA RUBIA EN CERVERA DEL RÍO ALHAMA (LA RIOJA)

El valle del Alhama cuenta con varios recursos interesantes para los amantes de la geología, la naturaleza y es sin duda un destino de paso obligado para los interesados en la cultura celtíbera.  Tras un paseo por la via verde del Alhama, una visita a los yacimientos de piritas de Navajún, o una alucinante excursión  por Contrebia Leucade y el Centro de Interpretación de Aguilar del Río Alhama, uno puede pasarse por Cervera a comer en el San Gil, o en La Rubia.
La Rubia está situado en una calleja estrecha y pintoresca a la que se llega tras una breve subida desde la carretera. Su decoración rustica y la distribución de sus comedores en varias cotas resultan muy acogedores. Es un restaurante de comida casera con merecida buena fama: hemos tomado un menú del día (11€ con cafe), unos con alubia verde con chorizo (en caldo de carne juraría) y lomo con pimientos y otro de ensalada mixta (Una de las más grandes que he visto nunca) y chipirones; postres caseros (mousse de queso y mermelada de frutos del bosque) y cafes. Todo muy bueno y en dosis abundantes. El servicio muy agradable y correcto. No hemos visto la carta así que no podemos hacernos a la idea de su oferta y precios fuera de menú y habrá que volver a repetir. VG

jueves, 19 de mayo de 2011

VINOS SIN NOMBRE III: PAGO BADRÁN

En nuestra busqueda de vinos sin nombre hemos hecho una pequeña incursión en el valle de San Millán, centrandonos en particular en catar vinos del municipio de Badarán, en el que hay al menos seis bodegas, la más conocida de ellas la de David Moreno, que este año ha sido ganadora de uno de los premios Best Of 2011 por su destacada labor en el impulso del enoturismo. Además de visitas a la bodega, ofrece la posibilidad de realizar cursos de cata, actividades de viña, y restaurante. Cuenta además con una amplia variedad de vinos que los Epicureos pudieron catar junto con el propietario de la bodega, y cuyos comentarios os recomiendo ojear:


Pero por ir más alla de lo conocido nosotros seguimos buscando buenos vinos un poco menos oidos y los hemos encontrado.

Son éstas tierras con tradición de claretes, y aunque de estos no hemos probado ninguno si queremos destacar y recomendar el Blanco Pago Badrán de Bodegas el Rincón del Prado que ha conseguido sorprendernos. 
En La Rioja se hacen, además de grandes tintos, muy buenos y variados blancos, y este es una muestra de ello. Es un vino muy particular, fresco y agradable en boca, con un toque de aguja que de primeras puede recordar los vinos verdes, pero de sabor extraodinario, y en su justo nivel de alcohol.
También hemos catadpo el crianza de esta misma bodega, que también es recomendable, pero sin duda la singularidad de su blanco es la digna de mención.

RESTAURANTE CHIQUI (SANTANDER)

Por fin he encontrado un hueco para comentar nuestra experiencia gastronómica en el conocido Hotel Chiqui en Santander. Lo primero que debo resaltar es que fuimos como invitados a una boda por lo que nuestra experiencia no debiera ser comparable a la que uno podría tener comiendo a la carta, por eso de que no es lo mismo cocinar para cinco que para cincuenta. El hotel está enclavado en una inmejorable posición desde la que contemplar la Bahia de Santander, justo al final de la playa del Sardinero y su restaurante se vanagloria de estar avalado por las más famosas guías del mercado, y esto a mi me enciende todas las alarmas.
Tras un cocktail de bienvenida servido en la terraza pasamos a degustar los platos elegidos por los novios para su celebración: Ensalada de bacalao al aroma de jerez, merluza rellana de marisco sobre fondo de espinacas, napada y gratinada en salsa holandesa, sorbete de limón, solomillo al foie en salasa de vino y tarta de hojaldre con helado en tulipa y pañuelo de tres chocolates.

 

Para los del anisakis, entre los que me incluyo (A pesar de que se dice que todo el pescado que se sirve en el hotel es congelado para cumplir la correspondiente normativa y bla bla prefiero no arriesgar fuera de los dominioos del hogar), se sirvió un menú alternativo con ensalada de iberico y frutos secos, y pastel caliente de verduras ne salsa de hongos. (Que según veo en la pagina del hotel son platos del menu de las noches gastronómicas que ofrecen por 35 € todo incluido)

 

Lo servido fue bastante normal para ser un sitio tan citado en las guías, y sí, claro que uno come lo que los novios elijan, pero hubo algunos comentados detalles que hacen que nosotros no incluyamos este restaurante en nuestra propia guía: por ejemplo, la merluza rellena de marisco, que la gente encontró buena, tenía además trocitos de jamón y lo que es peor champiñones que parecian de lata, y esto no es lo que uno espera encontrar en un sitio tan nombrado.
Mi ensalada y el pastel caliente estaban bien también, pero sin más: ensalada estilo precortada, y tipica salsita de boletus. En los menús de boda deberían ponerle a los solomillos una coletilla que dijera: "Solomillo al estilo ceremonia masiva" porque siempre me pregunto qué hubiera sido del solomillo en cuestión, a la brasa o pasadito por la plancha...seguro que nada que ver.
La selección de vinos buena: un blanco Rueda, un rosado de Navarra y Viña Alberdi Rioja.

Para constrastar opiniones de una comida estrictamente a la carta os dejo el enlace del Blog: Lo que coma don Manuel, al que de vez en cuando me asomo a ojear:
 https://loquecomadonmanuel.wordpress.com/2011/03/27/restaurante-chiqui-santander-muchos-detalles-no-tanto-sabor/

martes, 10 de mayo de 2011

DÍAS DE SUR (SANTANDER)

Callejeando por el centro de Santander, cerquita del Cañadío, encontramos este relajante restaurante y bar de pinchos que recomienda la Guía Michelín. La decoración del local es muy agradable, todo en tonos blancos y grises, es muy amplio y resulta luminoso. Nosotros solo tomamos unos pinchitos, porque las dos areas de comedor estaban llenas. Según anuncian en su carta hay 37 pinchos diferentes de comida internacional, porque entre sus cocineros hay varios santanderinos pero también un indio, un senegalés, uno de Costa de Marfil, un ecuatoriano...y una carta de vinos bastante amplia. Los precios por pincho alrededor de los tres euros y las raciones por unos nueve. Me pareció un sitio recomendable, porque los pinchitos estaban muy buenos. Y me quede con las ganas de comerme un chupachips y un sandwich de sobao pasiego con foie de los que anunciaba su carta, pero con este cerrabamos la ruta.
Os dejo unas fotos de mi lomo de Juanito con queso de nata y de las anchoas de Santoña.


En nuestra ruta también pasamos por las Bodegas Mazón a por unas Rabas, un sitio clásico según nos dijeron, un local muy grande y de aspecto antiguo, aunque yo me quedo con el Días de Sur.

lunes, 2 de mayo de 2011

CASA AZOFRA (BURGOS): HOMENAJE AL CORDERITO DE LECHE

Este fin de semana ha sido el elegido para celebrar nuestro particular homenaje al cordero de leche nacional y a sus pastores, que estan destinados al olvido tambíén por un consumidor cada vez más aficionado a los productos empaquetados de supermercado y a sus "maravillosas ofertas" que en ocasiones contienen sólo carne barata y además procedente de otros mercados.
Uno de los restaurantes de referencia para darle a este homenaje la categoría que se merece no está sin embargo recogido en "La Guía", es el Casa Azofra, en Burgos, a las puertas del Hospital del Rey que hoy alberga en su maravilloso marco la Facultad de Derecho de la Universidad de Burgos.
Al restaurante no le hace falta la publicidad de La Guía a la vista de la afluencia de publico que abarrota los varios comedores,y en anteriores ocasiones también ha sido siempre así. Nos comenta el asador que a lo largo del día ha asado algo más de 40 corderos, y eso que los hay tabién que van allí a comerse un chuletón.
El restaurante, en su interior, es un mesón castellano de vigas de madera vista y aspecto de solidez que uno no espera encontrarse tras la primera impresión antes de la entrada.


Asador de corderos y parillas a la entrada de Casa Azofra

Tras un desagradable encontronazo con el camarero, que aceleradamente pretende decidir nuestro menú, rompemos el hielo con unos pinchos de morcilla no del todo de mi agrado, pero en esto yo no soy precisamente neutral.
Por pareja elegimos un menú de cordero que se incluye en la carta, que recomiendo especialmente y que incluye: Ensalada de lechuga y cebolla, 1/4 de cordero, queso fresco y membrillo y vino. 65€ dos personas.
El cordero sensacional como siempre, marcado con la etiqueta de Tierra de Sabor que distingue a los productos agroalimentarios de calidad diferenciada de Castilla y León, el vino joven de Ribera del Duero, Lagunero de año de Bodegas Lambuena de Roa de Duero, bastante acertado, y el postre un casi buen punto y final.


Y digo casi porque una vez corregidas nuestras asperezas con el camarero éste nos saco unas botellas para tomar unos chupitos y unas rosquillas buenísimas para el café que fueron un gran detalle y que redondearon sin duda el menú.
Desde luego para nosotros este es un sitio muy recomendable.

KABANOVA LOGROÑO: SEGUNDA OPORTUNIDAD

De nuevo en Kabanova y esta vez a mediodía y a la carta, que en realidad y con el sistema actual de precios fijos por tipo de plato (primero, segundo y postre) que ha establecido este restaurante resulta como tomar un menu especial (unos 20€/persona).
Al llegar nos encontramos con un restaurante vacío, lo que unido a la estética del local hacía presagiar una comida de ambiente un tanto frío y comedido, que afortunadamente no resultó así. El servicio en este restaurante siempre es discreto y resulta un poco distante, pero a mi modo de ver agradable.
De nuevo un entrante lánguido de aceituna cortesía de la casa, tres primeros diferentes: El risotto de manitas de cerdo (Una elección muy acertada), una ensalada de queso de cabra (Correctísima) y una "ensaladilla roja" de aspecto poco apetecible pero de buen sabor.

 


Segundos de pluma iberica con jamón y entrecot todo con patatas y piquillos y un par de postres.
Nada especial pero una buena relación calidad precio. Me parece a mi que este restaurante no pasa por su mejor época, y que lo de los platos del Gaona crea tendencia. Y como ya dije este sitio si lo recomiendan las guías.