miércoles, 18 de enero de 2012

CATA DE POLEN Y MIELES CON CAMPOMIEL

Basta con pasar un rato en compañía de un apicultor para darse cuenta de lo fascinante que es el mundo de las abejas. Si además uno deja de lado sus miedos y es capaz de apuntarse a vivir la experiencia de realizar una visita a un colmenar, la fascinación puede derivar en una profunda devoción por estos animales.
Campomiel es una de las empresas que en La Rioja se dedica a la apicultura en todos sus ámbitos, y que oferta este tipo de salidas a colmenar, e incluso visitas a su obrador-centro de interpretación (para los mas miedosos) que culminan con una riquisima cata de sus productos apicolas.
Cualquiera de las dos ofertas es mas que aceptable.
La miel es un producto muy alabado, al que a veces es dificil adaptar el paladar.
El sabor de las tipicas  mieles de brezo es quizás demasiado fuerte para no iniciados, pero hay muchas otras opciones.
La miel de acacia y la de azahar son dos opciones de sabor suave y agradable para ir dejando de lado el azucar blanco. Son mieles muy fluidas que pueden servirse por ejemplo, con un yogurt natural y si bien sus propiedades de cara a prevenir catarros no son las mejores, su consumo también tiene ventajas para el organismo.
 Sin embargo, para no iniciados en esto de las mieles, y también para los ya adeptos, me gustaría recomendar una miel muy particular de este apicultor: la miel de romero, marca Campomiel.
Es una miel de aspecto curioso: es practicamente blanca. Su textura es extremadamente suave en las cucharadas más puras y muy granulosa en el resto. En boca, es como una cucharada de azucar glass que se deshace lentamente. Sólo tiene un problema: puede resultarte tan adictiva como la nocilla...

No estoy segura de que todas las campañas se pueda obtener una miel tan blanquecina como esta, ni se de que depende....



El otro producto estrella de esta marca apicola es sin duda su polen fresco, que también es posible catar en las visitas, aunque es un producto muy demandado y a veces lo encontraremos agotado. Ofertan fundamentalmente polen fresco de Jara Blanca (Cistus Laurifolius) cuyos granos son de un vivo color anaranjado, aunque también tienen polen de zarza, este de un color verdoso.
Campomiel es uno de los que mejor aplican las tecnicas de secado para la conservacion de este fragil producto, y eso lo nota el paladar, que no suele detectar los tipicos sabores avinagrados de otros productos similares.
Recomendar el polen fresco es quizas un tanto arriesgado, porque es un producto no demasiado popular, pero creo que al menos debeis probarlo. Y os recomiendo tambien ver este video (institucional)  sobre su curiosa recolecta, en este caso en la Reserva de la Biosfera de los valles del Leza, Jubera, Cidacos y Alhama de La Rioja, y sus propiedades. (Entre los min 3 y 4 se explica y ve la recogida)

martes, 17 de enero de 2012

CALLE LAUREL DE LOGROÑO: TRAMO DE SAN AGUSTIN

La calle San Agustín de Logroño discurre paralela a la famosa calle del Laurel, a la que está conectada a través de la travesía de esta última y de la calle Albornoz. En realidad, ahora mismo todo es "La Laurel" si hablamos de alternar o de salir a pinchar algo.
Este tramo de Laurel se ha revitalizado mucho en los últimos años, puesto que son unos cuantos los bares de pinchos que han abierto aqui sus puertas, sustituyendo en ocasiones a los antes tradicionales restaurantes.
Como digo la oferta es muy amplia y no citaré todos los que son, porque personalmente todos no los frecuento. Aunque a estas alturas ya tengo seleccionadas mis preferencias.
El que últimamente no ha cambiado es el Soldado de Tudelilla, y no le hace falta. Yo lo incluyo en mi ruta clasica. Los Epicureos hacen una gran descripción de lo que oferta el local, en barra y en mesa que os recomiendo leer, aunque en su cronica yo añadiría como pincho la riquisima ensalada de tomate que con tanta solemnidad preparan.
Aunque hace tiempo que no lo frecuentamos no quiero dejar de nombrar La gota de vino, por haber contribuido a la revitalización de la zona. Como digo, ya no solemos acercarnos a tomar su famoso "zorropito" (bocatita caliente de york o lomo, panceta y alioli) porque creemos que ya no es el mismo.... (Quizás los que hemos cambiado somos nosotros, o hemos tenido mala suerte). La verdad es que aqui no todo es zorropito y se puede optar por una amplia variedad de bocatas y raciones que puedes tomar sentado y cuentan con un ambiente bastante bueno.

La Taberna de Correos puede merecer una paradita también. Ocupa un local amplio y luminoso en la cofluencia con la travesía de Laurel. Oferta una seleccíon de brochetas variadas: de pluma iberica y miel, de queso rebozado...aunque sus "rabas de regadío" son una buena elección. Estas rabas son en realidad distintas verduras rebozadas en tempura y servidas junto a una salsita alioli.

Uno de los bares con mas exito en el entorno son "Los Rotos": personalmente aun no les he encontrado ningun encanto. Sirven huevos rotos con diferente condimento: bacalao, chistorra,...en un bollo de pan blado. Eso sí, a mis amigos, les llenan la barriga. Y ya han bierto sede en Madrid.

Aunque no está estrictamente en la calle San Agustín, no quiero dejar de nombrar el bar "La casita", porque en lo que supongo un intento por ampliar su clientela y su oferta, también han abierto una puerta a esta calle. La verdad es que a mi me gusta bastante su brocheta de pavo especiada, pero el bar se identifica irremediablemente con los sorbetes de limón, y no  con este pincho ni con el jamón que insisten en servir. Y nunca esta lleno.
Bar La Casita: brocheta de pavo y sorbete

Avanzando en la calle, y pasando por delante del Museo de La Rioja y de la plaza de San Agustín, llegamos al siguiente tramo de la calle presidido por el conocido restaurante "Las Cubanas", que hace ya un par de temporadas que habilitó su planta baja como elegante local de pinchos. Su categoría hace que sus precios esten algo por encima de la media, pero bien merece una visita. Una racioncita de cochinillo asado, un ravioli de gamba o un risotto son algunos de sus grandes exitos.

El "Rincón de Alberto" que ya tiene su propio post en esta página también se ubica en este tramo. Junto a él nos encontramos con el bar "La Canilla". Es una buena parada, aunque suele estar bastante lleno porque es demasiado pequeño. Sirven una exitosa racion de entrecot a la plancha con pimientos verdes y patatas paja.
Bar La Canilla
En este tramo también "El Mexicano" tiene su publico.

Las nuevas aperturas no cesan y si no recuerdo mal su nombre "De perdidos al rio" oferta además de un menú que hemos de ir a probar, una selección de tapitas de risottos variados.
Y arrastrado por las novedades de la calle el clasico "Bonsai" tambien ha ampliado mucho su oferta.